¡Ahorra hasta un 30% en tu seguro de auto!

Reparación de amortiguadores

Los amortiguadores del coche son una parte vital del sistema de suspensión. Ellos tienen la responsabilidad indispensable de evitar que tu viaje sea una tortura debido a los impactos o vibraciones. No solo se encuentra en los coches, sino también en otras clases de vehículos como las bicicletas, las motocicletas y los aviones.

Asimismo, los amortiguadores se adaptan al desnivel del terreno para mantener las ruedas en contacto con el suelo, lo que ayuda en la dirección y la tracción y estabiliza el coche ante aceleraciones y frenadas.

A continuación, te explicamos su definición y para qué sirven, sus partes y tipos más importantes, qué pasa si se dañan y los precios en el mercado.

¿Qué son los amortiguadores?

Cuando el vehículo se encuentra en movimiento, las irregularidades del camino se transmiten al coche. Los amortiguadores del vehículo son un componente común y muy necesario, que permite que estas irregularidades sean prácticamente disipadas.

Vamos a definir este componente en función de su concepto del diccionario. La Real Academia Española define el amortiguador como «un elemento o sistema mecánico que compensa y atenúa el efecto de choques, sacudidas o movimientos bruscos».

Por tanto, un amortiguador es un elemento construido en acero, en forma de resorte o de mecanismo, que absorbe la energía generada y disminuye las oscilaciones perjudiciales del camino.

¿Para qué sirven los amortiguadores?

La función primordial de los amortiguadores es la estabilidad del vehículo ante golpes e impactos durante cada trayecto, lo que mitiga sus efectos. Para ello, controla los movimientos de otros componentes como la suspensión, los resortes y los muelles. 

El resultado de su servicio se traduce en:

  • Comodidad y seguridad para los ocupantes, por más difícil que sea el camino.
  • Estabilidad ante las curvas del camino.
  • Mayor adherencia (agarre) de los cauchos a la vía. Los mantiene en contacto por más tiempo y transforma el peso del vehículo en presión.
  • Reducción de la distancia de frenado.
  • Limitación del movimiento de rebote de la suspensión.

Mientras mayor sea su capacidad para absorber la fuerza del punto inicial (ejes), menor será la intensidad de la fuerza disipada en su punto final (chasis, carrocería, habitáculo, entre otros). Si no existieran los amortiguadores, los golpes del camino podrían ocasionar daños a componentes o incluso a los ocupantes.

Partes de un amortiguador

Entre las partes que caracterizan los amortiguadores podemos mencionar las siguientes:

  • Soportes: piezas importantes de los amortiguadores que conectan este sistema con el chasis. A través de ellos, se transmite la fuerza cinética para una mejor disipación mientras el coche se mueve.
  • Cilindro: es la estructura externa del amortiguador, el cual contiene el fluido de trabajo hidráulico (aceite o gas). Este fluido actúa en oposición a las fuerzas ejercidas. Mientras más fuerza externa reciba, mayor será el movimiento del eje. En su interior, también existe otro tubo.
  • Eje: hecho de acero con acabado cromado, se encuentra en el extremo superior del amortiguador. Su función es servir de apoyo al chasis superior.
  • Pistón: parte móvil del sistema que se acciona por medio de la circulación del fluido. Para ello, se debe introducir con fuerza a través de los orificios o válvulas de paso. Se encarga de regular los procesos de compresión y de expansión.
  • Sistemas aislantes: son sistemas, generalmente de goma, que ayudan a este a reducir la vibración, el impacto y los ruidos como producto del movimiento del amortiguador o el sistema de suspensión.
  • Válvulas: permiten el paso del aceite entre una y otra cámara como producto de la compresión o expansión.

Tipos de amortiguadores para carros

¿Sabías que las bolsas de aire son amortiguadores? Los airbags, o bolsas de aire, son un tipo de amortiguador que tiene como función reducir las fuerzas generadas producto de un impacto a gran velocidad. No obstante, es un sistema que hace parte de la protección vital del coche.

Dentro del mercado, podrás encontrar un amplio catálogo de amortiguadores de diferentes tipos. Su selección dependerá en gran medida para qué lo emplearás. Por tanto, para que conozcas cuál es el amortiguador adecuado, te traemos una lista de los principales tipos y cómo están constituidos en funcionamiento los más comunes.

Amortiguadores hidráulicos

Los amortiguadores hidráulicos son el tipo más básico de este sistema. Tienen como función primordial la circulación forzada de un fluido de trabajo. Para ello, precisan de pistones que son movidos a través de un tubo que contiene el fluido. Su eficiencia aumenta al subir la presión sobre ellos.

Pero… ¿Qué tipos de amortiguadores hidráulicos existen? Podemos mencionar dos tipos principales:

  • Amortiguador de aceite: usa aceite hidráulico como fluido de trabajo. Consta de dos cámaras de aire y, a través de la activación de válvulas, desplazan el flujo de aceite de una cámara a otra.
  • Amortiguador de gas: usan gas nitrógeno como fluido de trabajo. Al ser un gas como el nitrógeno, no se calienta tanto, favoreciendo la no formación de burbujas. Son ideales para travesías irregulares.

Amortiguadores hidráulicos con válvula

Los amortiguadores hidráulicos con doble válvula son muy eficientes y proporcionan mayor suavidad a la conducción. Las válvulas permiten que tengan mayor efectividad que los tipos anteriores.

El aceite fluye a través de las válvulas siempre que exista presión. La dureza general de este elemento es en función del diámetro de válvula. Cuanto más pequeña es, más duro es el componente debido a una mayor resistencia al fluir.

Amortiguadores de doble tubo

Los amortiguadores de doble tubo son el tipo más común dentro del mercado. Está compuesto por dos tubos, uno dentro del otro, que se comunican por medio de unas válvulas de base. También integra un pistón con válvulas que es el encargado de transmitir la presión al fluido.

Los amortiguadores de doble tubo pueden funcionar con aceite hidráulico (no presurizados) o con una combinación de aceite y gas (presurizados). Estos últimos son más beneficiosos por tener un menor tamaño respecto de los no presurizados.

Amortiguadores monotubo

Su funcionamiento es similar al anterior, pero en vez de tener dos tubos, solo hay uno. Para ello, precisa de un pistón flotante que separa el aceite del gas. Su ventaja más importante es que tienen una mejor refrigeración de sus componentes y mayor eficiencia para disipar las vibraciones, por muy pequeñas que estas sean.

Amortiguadores regulables en dureza

Un tipo de amortiguador especial para coches todoterreno. Ofrecen una estructura flexible y le permite al conductor adaptar la amortiguación en función de las irregularidades del terreno. Al regularse el flujo de aceite en el interior del amortiguador, se aumenta o disminuye el diámetro del agujero de flujo.

Amortiguadores regulables en suspensión

A diferencia del anterior modelo, estos amortiguadores regulan la distancia entre la carrocería y el camino. Su flexibilidad se basa en el ajuste de la altura del vehículo, lo que influye notablemente en la aerodinámica y el centro de gravedad.

Con los amortiguadores regulables en suspensión se puede enfrentar cualquier trayecto en mejores condiciones. Entre sus ventajas más destacadas podemos señalar las siguientes que equilibran el peso del coche y que se puede bajar o subir el vehículo en función de las necesidades de conducción. Su uso principal es en coches deportivos

Amortiguadores reológicos

En cuanto a forma, los amortiguadores reológicos son idénticos a los otros tipos conocidos. Su mayor diferencia está en el fluido de trabajo, pues utilizan un líquido que modifica su viscosidad a voluntad. Este efecto se realiza de manera magnética o electrónica.

Este fluido se compone de un material viscoelástico (aceite) en cuyo interior se incorpora hasta un 40 % de material metálico (micropartículas). Al aplicar electricidad o corriente magnética, el aceite con micropartículas se orienta de forma uniforme, lo que ofrece al líquido más viscosidad.

El conductor puede ajustar a voluntad la dureza del amortiguador en cualquier instante y en función de su gusto de conducción o de las exigencias del camino. Precisa de sensores y de una centralita para poder funcionar y dar control dinámico sobre todo el coche. Asimismo, no requiere de mantenimiento.

¿Por qué pueden fallar los amortiguadores?

El mantenimiento de estas piezas no se debe descuidar. Como están ocultos bajo la carrocería, es probable que no se preste atención a sus cuidados. Igualmente, la inestabilidad progresiva que el coche pueda presentar se tiende a compensar de manera inconsciente.

Por eso, aquí te daremos un resumen de las razones que hacen que el comportamiento del amortiguador sea irregular y lo haga fallar:

  • La degradación de los materiales que lo componen como producto del tiempo.
  • Fugas que se notan en la estructura externa del amortiguador. En este caso, la fuga de aceite como producto de la pérdida de estanqueidad ocasiona que el componente no amortigüe.
  • Los elementos de apoyo con desgaste o deterioro progresivo.
  • Guardapolvos rotos.
  • Rosca estropeada.
  • Una rotura en el muelle como producto de corrosión no atendida o un golpe muy fuerte al transitar.
  • Topes de amortiguador desgastados.
  • Válvulas flojas o desgarradas. Este problema es serio, ya que compromete la parte interna del amortiguador. Si el aceite tiene facilidad para pasar de un compartimiento a otro, no cumplirá su función, es decir, no amortiguará.
  • Vástago dañado o torcido, lo que ocasiona fallo en el movimiento lineal del amortiguador.

Síntomas de amortiguadores dañados

Entre los síntomas que podemos notar en los amortiguadores dañados, destacamos estos:

  • Rebote excesivo del coche al momento de pasar algún bache.
  • Anormalidad al pasar una curva o al momento de una frenada fuerte.
  • Desgaste en los neumáticos en un menor tiempo de uso.
  • Ruidos en los amortiguadores como producto de piezas rotas en el interior que se notan más al enfrentar baches o curvas.
  • Vibraciones anormales en el coche.
  • Vehículo desnivelado.

¿Cuánto cuesta la reparación de amortiguadores de un auto?

Por último, queremos darte una referencia de los costos que puede tener la reparación de los amortiguadores de un coche. Hay que señalar que un amortiguador tiene una vida media de unos 50 000 KM, con una revisión cada 15 000 a 20 000 KM. Se recomienda su cambio por completo entre los 60 000 y 80 000 KM.

El precio de una reparación o cambio dependerá exclusivamente de la marca y del modelo del vehículo. Por ejemplo, el costo de reparación no es igual para un amortiguador Fiesta Power Max Move y un amortiguador Ford EcoSport Delantero.

De todas formas, el modo de conducir también influirá en su selección, pues algunos sistemas están diseñados para soportar grandes cargas. Otro aspecto relevante será dónde vivas.

En México podemos ver precios diferentes:

  • Para los amortiguadores delanteros, el precio promedio de la pieza y mano de obra es de 6,300 pesos.
  • En el caso de los amortiguadores traseros, un sistema un tanto más sencillo, el costo de reparación o cambio promedio es de 4,450 pesos. 

Antes de este artículo, quizás el funcionamiento de los amortiguadores te resultaba indiferente, pero ahora que sabes que son una parte esencial en tu seguridad activa, te los tomarás más en serio. Evita preocupaciones y gastos imprevistos. Protege tu vehículo con Crabi, tu seguro de auto como quieres. ¡Cotiza en 30 segundos y contrata tu póliza personalizada fácilmente!

Bibliografía

Obten una cotización para tu auto ¡En 30 segundos!👇🏻

Oops! Something went wrong while submitting the form.

Llena estos campos para cotizar tu seguro

Warning Msg
$0.00 MXN (Pago anual)
$0.00 con (Pago mensual)
¿Tienes dudas?
Inicia un chat en vivo
Oops! Something went wrong while submitting the form.

¿Sabes que es CrabiPass
incluido en tu Póliza?

Adquiere baterías, llantas, refacciones estéticas, realiza mantenimientos, verificación anual, diagnósticos para tu auto y mucho más.

Quiero saber másQuiero saber más

Bibliografía:

Equipo Editorial de Crabi

Somos el primer seguro de auto 100% digital de México. Somos diferentes y estamos aquí para desafiar y cambiar la industria de autoseguros, creando el seguro como quieres: confiable, transparente y muy fácil de usar.

Escrito por el

Equipo editorial de Crabi

Stalin Bistochett
Sr. Product Designer
María Inés Huguenin
Head of CX & Brand

¿Convencido?

Estás a un click de protección y paz mental.

Empresas que nos respaldan